Los jóvenes mexicanos tienen temor a la hora de hablar sobre contabilidad, debido a que piensan que es difícil, que Hacienda está vigilándolos por todos lados, o bien, nunca han tenido una experiencia con sus asuntos fiscales, pues no han tenido la necesidad.
Es muy común que los jóvenes que no han establecido contacto directo con la profesión la perciban complicada, pero no es así. En un principio se piensa que la contabilidad sería algo repetitivo y metodológico, que la mayor parte del trabajo sería escribir y sacar cuentas a mano, pero esto es un error; esa es la contabilidad del siglo pasado.
La contabilidad facilita la transparencia por parte de las empresas y las personas para evitar problemas como el lavado de dinero y fraude.
Así como muchos jóvenes tienen una perspectiva errónea de la contabilidad, también tienen una visión errónea sobre los contadores.
Muchos piensan que los contadores sólo llevan las cuentas y el pago de impuestos, pero se olvidan que este profesional puede ser también un asesor fiscal el cual les ayude a que su pago de impuestos sea mucho más sencillo.
No importa lo automatizados que sean los procesos fiscales, la asistencia de un contador siempre será necesaria, pues ellos son profesionales que siempre están enterados de los cambios que aplican las autoridades fiscales.
Comentários